Atlanta con 10 hombres se llevó un punto del Bronx al empatar 1-1 ante el local NYCFC

Deporte de Primera USA Por Rafael Estrada

Sobró ganas, pero faltó fútbol. Hubo dos goles que fue suficiente para abrigar el escenario en una noche fría. Un gol para cada equipo, que al final fue buen premio para Atlanta United porque gran parte del segundo jugó con un hombre menos por expulsión de Ibarra. Después, NYCFC intentó tomar el control del partido. No pudo. Fue todo lo contrario porque la visita se puso adelante en el marcador por intermedio de . Dos minutos más tarde el uruguayo Fereira empató el marcador tras un excelente remate de zurda. 1 a 1. Después, una y otra llegada de ambos solo sirvió para que el reloj marcará los 90 más 10 de tiempo adicionado.

Cuando el partido carece de buenas jugadas, siempre las esperanzas están en los jugadores que saben más. Aquellos que marcar la diferencia como el argentino Thiago Almada. Es el diferente. Es el que llegó a la MLS para ayudar al crecimiento del campeonato. Es el que despierta el interés hasta del hincha contrario porque sabe tratar a la pelota con mucha calidad.

Cuando tiene la pelota la pasa bien. Y, sí, su equipo está encerrada alarga la pelota para abrir el juego. Posee un extraordinario panorama que ayuda a salir al equipo. Tiene muchas virtudes, que seguramente a lo largo del campeonato seguirá siendo pieza importante para Atlanta.

Por su lado, NYCFC, no hay duda que sigue extrañando a Frasquito Moralez. Carece de creación. De jugadas sorpresas. De juego impensado. De aquellas acciones que levante al hincha de las graderías como ocurrió hasta el año pasado. La Celeste Neoyorquina ha perdido jugadores importantes para la presente temporada.

Con lo que tiene da pelea. Lucha. Trata. Quiere ganar, pero le cuesta. Eso sí, el equipo tiene que mejorar en muchos aspectos para meterse a la pelea tratando de ser más parejo. Cierto que hay mucha tela por cortar, pero New York está obligado a mejorar. La idea es no pasar dolores de cabeza, sobre todo cuando de local.

Dicen que una de las cosas importantes en el fútbol es no perder. Cierto. Pero el equipo neoyorquino no puede dejar escapar puntos en casa. Todos los partidos de local tendría que ganarlo. La idea, por supuesto, es llegar a los playoffs. Para eso tiene enderezar el barco. Está a tiempo. Solo corrigiendo varios aspectos dentro del plantel, el equipo podría llegar lejos. De lo contrario…