RESUMEN: Inter de Miami continúa de capa caída

Por Pedro González

Los jugadores del Inter Miami se marcharon abucheados este sábado 2 de abril del DRV PNK Stadium, después de cosechar otra lamentable derrota en una noche de tormenta en la que se demoró casi dos horas el inicio del encuentro. El Inter no jugó tan mal partido, en general, pero como de costumbre fue penalizado en ambas áreas, esta vez por el Dynamo Houston que se llevó un buen triunfo 3-1 que enciende todas la alarmas en Miami.

Y es que resulta inexplicable que el Inter no haya conseguido ganar esta temporada, pero es el resultado de un equipo mal entrenado, mal alineado y consentido que no juega a nada.- ANUNCIOS -https://s.yimg.com/rq/darla/4-10-1/html/r-sf-flx.html

Nadie se explica que sea Gonzalo Higuaín el hombre que tire todos los tiros de esquina y las faltas lejanas, que haya tanto espacios, que cueste dar varios pases seguidos y sobre todo hacer jugadas de gol, disparando casi siempre al arco sin opciones reales de marcar.

De ahí que aunque Miami disparó el doble de veces a portería que su rival (22-11) ambos tuvieran igualdad de tiros entre los tres palos (5), la diferencia que de esos cinco solo uno fue gol (de penal), mientas Houston anotaba tres.

Los autores de los tantos fueron Darwin Quintero (49’) y Fafà Picault (57’, 92’) por el Dynamo; mientras que por el Inter anotó Higuaín (66’).

Con menos que esto cualquier técnico en cualquier equipo y en cualquier nivel es despedido o renuncia, pero este no es el caso de Miami. Phil Neville seguirá y lo más seguro es que esto así , por las buenas, no se va a arreglar.

El Inter salió con un nuevo once con Nick Marsman; DeAndre Yedlin, Damion Lowe, Christopher McVey, Noah Allen; Jean Mota, Gregore, Robert Taylor; Asier Lassiter, Higuaín y Robbie Robinson.

El entrenador Neville introdujo algunos cambios. Debutaba Marsman esta temporada, reapareció Allen, tras las lesiones de Kieran Gibbs y Break Shea, Lassiter volvió a ser titular y entró Robinson por Mo Adams, pero de nada le valió.

Lo peor es que esto no es nada, sino lo que viene con New England, Seattle y Atlanta.

Juego

El primer tiempo terminó 0-0, aunque el Inter mereció un mayor premio al tener una buena cantidad de ocasiones (12) y el mayor control del juego (51%).

El primer aviso del Dynamo llegó al minuto uno en un disparo de Corey Baird y el segundo al minuto seis cuando Fafà Picault se fue solo y ambas ocasiones fueron desbaratadas por Marsman, cuyo regreso era imprescindible; mientras por Miami replicaban Lassiter (7’) y Mota (8’) con dos buenos disparos.

En los primeros 15 minutos Miami tuvo más el balón (60%) y era mejor, los otros 15’ Houston emparejó un poco el dominio, aunque el Inter, bien plantado, era el que tenía las ocasiones.

Taylor estuvo a punto de materializar una de esas oportunidades con un disparo que pasó rozando el palo tras un taconazo de Higuaín al 41’.

Al minuto 49 Houston abrió el marcador con un remate de cabeza a bocajarro de Quintero tras un centro desde la derecha, con la suerte de que el desvío de Allen le cayó justo en la cabeza al colombiano para el 1-0 en el marcador favorable al Dynamo.

Poco después, al 56’ un error de coordinación entre Marsman y Lowe provocó que el portero de Miami cometiera un penalti innecesario sobre Quintero y Picaut (57’) no falló desde los 11 metros para poner el juego 2-0 a favor de Houston.

Neville mandó a Taylor al ataque cambiando a un 4-2-4 más ofensivo para intentar darle vuelta al marcador y el cambio dio resultado. En un centro de Allen desde la izquierda el balón le cayó a Taylor que fue derribado por el portero Steve Clark y la pena máxima la ejecutó muy bien Higuaín para marcar el primero del Inter y acercarse en el marcador 2-1.

Al 81 entraron de golpe Leo Campana, Mo Adams y Emerson Rodríguez por Robinson, Mota y Lassiter respectivamente, pero los cambios no consiguieron cambiar el marcador.

Para colmo, ya con el tiempo cumplido, Picault le dio la puntilla soltando un disparo cruzado de derecha después de entrar solo en el área para poner el definitivo 3-1 en la pizarra.

El Inter pese a que lo intentó cosechó otra dolorosa derrota.