Neymar y su sueño de jugar con Messi: ¿guiño al Barça o anzuelo al PSG?
5 minutos de lecturaNeymar maneja el show y la escena como nadie. No da puntada sin hilo el brasileño. Quedó para el recuerdo cómo compuso la foto de la MSN, alineando a sus amigos Suárez y Messi para que el plano fuera limpio en aquella celebración icónica contra el Atlético. Fue capaz de provocar el mayor traspaso de la historia del fútbol cuando nadie apostaba por que un equipo fuera capaz de pagar 222 millones de euros por él. Y ahora, quién sabe si de manera premeditada o improvisada, ha puesto sobre la mesa un posible movimiento de mercado de los que hacen temblar el planeta fútbol. Neymar dispara con bala.
Porque su declaración en la televisión argentina («quiero volver a jugar con Leo, seguro que el próximo año tenemos que hacerlo«) ha puesto en alerta a clubes y aficionados, un mensaje que ilusiona y aterroriza a la vez al culé. ¿Es un guiño a los precandidatos del Barça? ¿O un anzuelo a Messi y PSG para juntarse en París? Aunque la pregunta es por el PSG, Neymar, en su respuesta de manera textual no alude al lugar donde se pueden juntar. Sin certezas de lo que pueda suceder, sí hay claves que ponen en contexto la bomba de Neymar.
Barça
Neymar se va asomando al tablero de la carrera electoral. Rousaud ya dijo que lo quería y Laporta ya se atreve a coquetear sobre el brasileño, recogiendo el guante del 11. Joan quiere juntar de nuevo a Leo con Ney, aunque fuentes del entorno azulgrana ven imposible la operación por la situación económica del club. De hecho, el propio presidente interino, Tusquets, lo ha asegurado: «Si viene gratis, tal vez se podría plantear. Salvo que el próximo presidente hiciera un milagro o si se vende y todo el dinero va a esta operación…». En cualquier caso, hay que tener en cuenta distintos factores:
1. La mejor ‘oferta’ para Messi
Si hay que convencer a Messi para que renueve, seguramente no hay mejor argumento que juntarle de nuevo con el jugador que tanto ha echado de menos y por el que tanto apostó, de manera personal, para que volviera al Barça hace dos veranos. A este Leo apagado tras el adiós de Suárez y desencantado por el proyecto («se van haciendo malabares y van tapando agujeros a medida que van pasando las cosas«) le supondría un plus reencontrarse con la alegría y la calidad de Ney. Disfrutaría en el vestuario y se vería mejor rodeado en el césped.
2. Cumplir el deseo de Neymar
Poco tardó en Neymar en darse cuenta de que no se tenía que haber ido a París de la mano de Dani Alves, que en cierta manera desempeñó un papel decisivo para convencer a Neymar de juntarse en el PSG. Aseguran quienes conocen a Ney que el motivo de su adiós no fue para nada dejar de estar a la sombra de Messi. La relación de ambos fue in crescendo. Ney solo ganó una Champions… con Leo al lado. Y todos pusieron de su parte para que se lograra, incluso con el padre poniendo 20 millones de su bolsillo, según reveló el ex directivo Borda. y los propios pesos pesados dispuestos a bajarse el sueldo. ¿Buscarán la definitiva?
PSG
El PSG se encuentra en la antesala de unos meses decisivos para la definición del proyecto parisino del futuro. Las dos grandes figuras que juntó en 2017, Neymar y Mbappé, acaban contrato ambas en 2022, es decir, en verano entran en último año, una situación que invita o a renovación o a venta, para evitar que cualquiera de los dos se vaya libre en 18 meses. La victoria en Old Trafford ha calmado las aguas del Sena, porque el abismo de la eliminación estuvo presente. En cualquier caso, no inquieta, sino que incluso gustan las palabras de Ney, porque se entiende en que mientras su jugador es feliz allí, el que no lo es es Messi en Barcelona.
1. Renovaciones
Desde París se ve más factible la ampliación de Neymar que la de Kylian, cuyo destino está asumido desde hace tiempo que será el Bernabéu. En cualquier caso, todo puede pasar, porque son jugadores impredecibles, los dos traspasos más grandes de la historia del fútbol. Los intentos de Ney de salir de París fueron infructuosos y el crack de Santos acarició el gran objetivo para el que llegó, ganar la Champions. Quedó subcampeón. En su cuarta temporada en el Parque de los Príncipes, las mismas que estuvo en Can Barça, tiene que tomar una decisión que marcará su carrera. A sus 28 años (29 en febrero), firmar el último gran contrato en plenitud y alargar su estancia en París… o buscar otro cambio.
2. Lo difícil que es salir de París
Hay clubes, pocos, en los que la petición de salir en último año de contrato bajo amenaza de aguantar otra temporada e irse gratis no lleva a ninguna parte. París es el claro ejemplo. La lista de jugadores que han tenido que aguantar un año para poder cambiar de aires es amplia cuantitativamente y relevante cualitativamente: Rabiot, Cavani o Thiago Silva pueden dar fe de ello. Menos importantes fueron Meunier y Choupo-Moting. Verratti y el propio Neymar saben lo difícil que es salir de París. Todavía no lo han conseguido. Ahora, si Neymar quiere volver a jugar con Messi, no hay muchas más opciones. Aunque económicamente sería insostenible juntar en un mismo equipo a Ney, Mbappé y Leo, por mucho que el 10 llegara gratis.